Crónica: Cierre de zapaterías

Milenio.com,
6 de junio de 2007.

• Nadie camina por los portales

• La industria del calzado sepulta 40 negocios en Los Portales del Calzado, un complejo comercial que perdió el paso.

Nadie camina por los portales, decenas de cortinas permanecen cerradas, custodian más de 40 viejas zapaterías que dejaron de operar en los últimos años, “el contrabando y la inseguridad los sepultaron casi a todos, la gente dejó de comprar, muchos tenían negocios en Esteban Alatorre y prefirieron irse de aquí porque de plano ya no vendían nada, si quedan tres o cuatro negocios en los dos módulos son muchos”, dice don Luis, empleado en una operadora turística asentada en Los Portales del Calzado, un complejo comercial construido a principios de 1990, frente a la central camionera.

“Quedamos muy pocas zapaterías, aquí todo está muerto, en los últimos dos años todo se puso peor, pasan días enteros sin que vendamos un solo par de zapatos”, coinciden empleados en las zapaterías sobrevivientes. Los letreros de outlet y rebajas de hasta 60 por ciento son insuficientes para atraer compradores a Los Portales del Calzado, “lo malo es que no hay promoción, mucha gente pasa por afuera y no se da cuenta que hay zapaterías adentro”, dice Horacio Godoy, encargado en una de los pocos negocios sobrevivientes.

De acuerdo con la Cámara de la Industria del Calzado del Estado de Jalisco (CICEJ), en el último lustro cientos de zapaterías asentadas en la zona metropolitana cerraron sus puertas, y señala Los Portales del Calzado, Forum del Calzado y Esteban Alatorre como los puntos más afectados, donde al menos se perdieron 200 puntos de venta en los últimos cinco años.

En Los Portales del Calzado, el consumo de calzado se mantiene en picada, las cuatro zapaterías que mantienen operaciones amenazan con cerrar en cualquier momento, “la última cerró como hace un mes, el dueño tenía un local en Esteban Alatorre y prefirió irse para allá”, revela uno de los pocos empleados en las zapaterías del complejo, ubicado frente a la Nueva Central Camionera, que en principio fue el eje que motivó la construcción de este complejo comercial, “se pensó que el flujo de pasajeros podría servir para la compra de mayoreo de zapatos, pero dejó de ser así, los chinos se comieron todo ese mercado”, agrega.

El cierre masivo de zapaterías en Los Portales del Calzado motivó un cambio de giro en el complejo comercial, donde el sector del transporte empieza a ganar el paso, Estrellas del Pacífico y otras empresas del ramo tienen oficinas en este centro, donde los pasillos son ocupados por algunos choferes en lugar de compradores, “todo esto va en picada, la gente no compra zapatos, pero empresas de otros giros empiezan a ocupar algunos locales”, dicen.

En el estacionamiento, un viejo auto rojo luce el abandono, igual que el centro comercial. Un letrero de lona impresa: “Los Portales del Calzado”, ondea ante los vientos de la canícula y el reloj de la supervivencia, marca las doce del día en una cuenta regresiva para los pocos negocios sobrevivientes.

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