Hoylaredo.net,
3 de julio de 2007,
Juan Manuel Mejía Domínguez.
3 de julio de 2007,
Juan Manuel Mejía Domínguez.
México.
MÉXICO.- El poder de las mafias del contrabando en México, controladas por chinos, coreanos y mexicanos, alcanza niveles de impunidad sin precedentes, las millonarias perdidas que genera la introducción ilegal de calzado chino y coreano a través de nuestra frontera y puertos, evidencia el grado de corrupción y trafico de influencias que durante decenas de años la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ha protegido.
Los sobornos y órdenes que reciben los funcionarios aduanales y un sinnúmero de funcionarios de cualquier nivel de gobierno federal, estatal y municipal, en la introducción de contrabando desquebrajan la economía nacional, a las empresas mexicanas, favoreciendo a la delincuencia organizada que en estos días es internacional con la presencia de la mafia china y coreana, apoyada por grupos mexicanos.El contrabando y la piratería en territorio nacional van más allá de un simple dato sobre la corrupción. México, encabeza la lista de países en América Latina con mayor consumo de productos falsificados, las perdidas por estos delitos son del orden de 200 mil millones de pesos por evasión al impuesto al Valor Agregado (IVA) y al impuesto de importación, referente del Derecho al Tramite Aduanero (DTA) tan popular al revelarse el caso ISOSA.
En menos de diez años, las mafias china y coreana crearon su imperio en México, y desde aquí han extendido sus redes hasta Centroamérica, el sur de California y la Florida, desde el 2000 durante la administración del ex presidente Vicente Fox Quesada, se estima que los ingresos del contrabando asiático superan los 33 mil millones de dólares, en la actualidad esta suma llega a los 50 mil millones de dólares, ganancias superiores a las captaciones anuales por venta de petróleo.
Con el enemigo en casa
La indigencia en el combate a este ilícito, de la Procuraduría General de la República (PGR), y la SHCP, permite que las ventas en comercios formales e informales de contrabando superen el 70 por ciento del total de comercialización tan solo en la capital.
Secadoras de pelo, maquinas de coser mágicas, tenis, sandalias, MP3, autoestéreos, ropa, telas, platería y bisuterías, ingresan al país caja por caja, en barcos con contenedores, camiones y a pie por las fronteras de Baja California, Sonora, Chihuahua y Tamaulipas, así como los puertos de Tamaulipas, Veracruz y Colima.
El barrio de Tepito, en la colonia Morelos delegación Cuauhtémoc, siempre ha representado un santuario de las organizaciones criminales y un jugoso negocio para jefes policíacos de la PGR, Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y Procuraduría de Justicia capitalinas (PGJDF)
La organizada red de intereses que protege a líderes de comerciantes ambulantes que hacen negocio con todo incluyendo drogas, en los que aparecen los hermanos Samuel y Mario el catrín González Aguilar, responsables de descargar entre dos y tres traileres de contrabando de forma nocturna y diurna bajo la protección de patrullas de la SSP en la calle de Costa Rica 45, precisamente a un lado donde la madrugada del jueves el gobierno del Distrito Federal, decidió expropiar las plazas de calzado 47 y 54, conocidas como Tepiplaza y Plaza Costa Rica, respectivamente.
Las mafias han logrado también la protección de elementos de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) adscritos al área de combate a piratería y drogas, frenando las investigaciones que la delegación metropolitana iniciaba a las denuncias de contrabando y narcomenudeo.
Víctor Juárez, ex comandante de la desaparecida Policía Judicial Federal (PJF), es otro de los capos del contrabando, su centro de operaciones localizado en la cerrada de Díaz de León, no es investigado gracias a la protección de agentes federales.
Los hermanos Antonio toño vera y Alejandro el pifas Varela, Luís el diablo y Rafael Cruz, son los encargados de controlar el contrabando y venta de narcomenudeo en la zona de la líder de comerciantes ambulantes, María Rossete Sánchez, gente de Rene Bejarano Martínez y Dolores Padierna Luna, en las calles de Florida, Peña y Peña, Argentina, Aztecas, Costa Rica, Apartado y Eje Uno Norte, desde Reforma hasta la Avenida del Trabajo.
Y es que en Tepito se bisnea de todo y con todo, se compra, se vende, se talonea, se trafica, se transa, se roba, se huye, se mata y se remata, así es Tepito.
Armas, piratería y drogas son comerciadas frente a la autoridad local o federal, sin que estos pongan orden en este lugar, la ley, No existe.
Los servicios de inteligencia federal y local, sólo sirven para mantener a raya a grillos, periodistas y líderes de comerciantes que exigen más lugares, negociando con la autoridad, dándose atole con el dedo mutuamente.
Son 2 kilómetros y medio lo que separa a la autoridad federal y capitalina del lugar donde opera la delincuencia organizada, las mafias china y coreana que han adquirido enorme poder, tal que superan al de los mexicanos.
Son cientos de soldados en la mafia
La delincuencia organizada en el Centro Histórico y Tepito, han organizado un ejercito de cientos de soldados, halcones que vigilan los operativos de la PGR, PGJDF y SSP, el aviso de los delincuentes a sus compinches y de estos a los narcomenudistas y contrabandistas tiene mil formas, entre ellas miradas, chiflidos, señas, códigos no escritos y de la tecnología de punta, es decir los aparatos de radiocomunicación, para evadir la acción de la justicia.
En la administración de Calderón Hinojosa y Ebrard Casaubón, se han ordenado decenas de operaciones que lesionan intereses y movimientos de las mafias del narcotráfico y el contrabando, las incursiones más espectaculares han ocurrido en Tepito, considerado el centro del mundo criminal en la capital.
Antipirateria, contrabando, narcomenudeo y delitos del fuero común, buscan ser abatidos con el despliegue de cientos de efectivos de la AFI, SSP y Policía Federal Preventiva (PFP), se busca dejar sin cabeza a esas organizaciones, con expropiaciones e investigaciones al flujo económico, esto es a las ganancias de la delincuencia.
El control del barrio lo tienen chinos y coreanos, y no de hoy, esto tiene aproximadamente 6 años, Tepito ha perdido su condición de lugar único con el corredor de drogas de la delegación Gustavo A. Madero, Cuauhtémoc, Iztapalapa a la zona metropolitana en Nezahualcoyótl, Chimalhuacan, Ecatepec y Tlalnepantla, lugares a los que en operación cucaracha los delincuentes han sentado sus bases.
Tepito es y seguirá siendo el lugar de aparatos robados, droga, contrabando y piratería, los almacenes y fábricas de artículos piratas se han expandido hasta zonas alejadas de Tepito, como una forma de evadir a la policía. Ahora los centros de recepción y distribución están en San Juan de Aragón, Pantano, Iztapalapa, Ecatepec, Nezahualcoyótl y Tlalnepantla.
Los chinos y coreanos han afianzado su presencia en Monterrey, Guadalajara y la Ciudad de México, sus operaciones acentuaron la violencia a la hora de aplicar sus reglas, y han llegado incluso a confundirse con los ajustes ordenados por los narcotraficantes.
Sus movimientos entrañan un reto mayúsculo para las autoridades, porque la forma en que cierran sus contratos es demasiada simple basta con que los contrabandistas mexicanos se pongan en contacto con el único compromiso de vender, las ganancias se dividen y si no hay venta, los artículos se devuelven. Una traición es un contrato de muerte.
Expropiaciones como solución
El gobierno del Distrito Federal, anunció la expropiación de 24 predios del perímetro B del Centro Histórico, entre ellos los de Costa Rica 47 y 54, ahí por la madrugada del viernes llegaron más de 600 efectivos de la AFI, PFP y SSP, para acordonar el área y confiscar 40 toneladas de calzado chino de contrabando.
En la Gaceta Oficial del gobierno capitalino del 29 de junio del presenta año, se lee en el decreto. “Se expropian a favor del Distrito Federal los inmuebles de Costa Rica 47 y 54, para el establecimiento de corredores artesanales y de desarrollo económico, que coadyuven a mejorar el nivel y la calidad de vida de la población”.
En el documento también se mencionan otros 22 predios en las calles Del Carmen, República de Argentina, Paraguay, Manzanares, Eje 1 Oriente, Santo Tomás, República del Salvador, La Santísima, Circunvalación, Perú, Brasil, Venezuela y Santo Tomás, en los que se presume actividades de la delincuencia organizada.
En conferencia de prensa el titular de la SSP, Joel Ortega Cuevas, aseguro que con la expropiación de los predios Plaza Tepito y Plaza Costa Rica, se busca que estos sitios sean utilizados para la rehabilitación de comerciantes informales.
Lanzo una advertencia. “No va haber área en donde el crimen del fuero común o el crimen organizado piense que va a tener algún reducto, el día de hoy podemos inscribir esta acción en la más importante acción que se haya hecho en contra del contrabando en esta época, no se trata solamente de hacer los decomisos y detener personas, si no era entrar a romper la columna vertebral, la infraestructura en la que se soportan estas personas que a final de cuentas constituyen delitos federales y esto va acompañado de la acción del gobierno de la ciudad”.
Ortega Cuevas, sostuvo que el aseguramiento de los predios, es una de las acciones más importante en contra del contrabando y dio a conocer que dentro de estos lugares hay sucursales bancarias, que sirven para agilizar los trámites ilícitos.
Bancos en la mira de PGR, SSP y SHCP
Ahora la Unidad de Inteligencia Financiera del gdf, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) de la PGR, y la SHCP, investigarán los flujos financieros que se registraban en las plazas Costa Rica y Tepiplaza.
El jefe de gobierno capitalino, afirmo que en esos lugares había bancos e incluso casas de cambio, por lo que solicitarán también la colaboración de la Hacienda para hacer las investigaciones. “Tenemos que hacerlo con Hacienda, para dar el seguimiento al manejo financiero que se hacía ahí. Ahí teníamos sucursales bancarias, casas de cambio, quiere decir que había mucho flujo de efectivo”.
Sostuvo que la principal causa por la que participó la PGR en el operativo es la gran cantidad de contrabando, sobre todo de calzado, que se manejaba. “A Hacienda le corresponde hacer un seguimiento y nosotros participaríamos a través de la Unidad de Inteligencia Financiera”.
En estas investigaciones sólo falta aclarar, ¿Quién permitió la entrada de este contrabando?, ¿Alcanzara a los protectores y sus cabezas o sólo quedara en los intermediarios?
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